EL CAMBALACHE DE LA POLÍTICA ARGENTINA
Cuando Enrique Santos Discépolo escribió el tango Cambalache superó a las profecías de Nostradamus. Denunciaba en esa magnífica letra la explotación, la corruptela, la delincuencia y hoy vemos cómo estos brotes febriles que nos matan a sangre fría se mezclan con el discurso progresista de falsa revolución, la cual ni siquiera fue escaramuza libertaria; pero sí tuvo todo de traición.
A eso se refería el compositor cuando habló de “la biblia junto al calefón”, frase en la que plasmó cuánto la dimensión de la mentira se entrecruza con la de realidad.
En Argentina da igual ser de derecha que de izquierda, kirchnerista o radical. Si hasta da escalofríos al ver cómo las palabras de estos y aquellos dicen lo mismo.
Mientras la Señora grita las ventajas de su gobierno debemos enfrentarnos a las medidas económicas más reaccionarias: retenciones a las exportaciones, cepo del dólar, desindustrialización, desempleo o empleo informal y todas las aberraciones que el etcétera implica. Y, para sorpresa de cualquier analista político, la oligarquía habla de justicia social, pleno empleo, pobreza cero. Y otra vez el etcétera tapa la vergüenza de ver a los postulados del General Perón sucios por la avaricia.
La mujer no da un índice de pobreza porque ello sería categorizar a los pobres, pero toma como medida de crecimiento que en cada casa hay un televisor. En tanto aúlla el desendeudamiento con el FMI aumenta el “swap” con China, terrible deuda a tasas más usurarias que las del mismo Fondo (me pregunto cuál es la diferencia entre un buitre europeo y uno de exóticas tierras). Por delante hace la V de la Victoria y por detrás desprecia a Perón. Y así sigue el listado de lo que no es incoherencia sino vileza en contra de los principios peronistas.
Sería muy simple encuadrar a la presidenta en el relato de una mentirosa. Es mucho más profundo; ella realmente está convencida de haber sido y ser una revolucionaria. Un decir enfermo que puede parir debido a la resignación y a la aparente domesticación del pueblo argentino.
Ya no debemos hacer nada, si no lo hicimos antes hacerlo ahora sería un despropósito. El país ya fue fundido bajo nuestras narices. Pero no metamos la cabeza bajo la tierra. Si llegamos a esto fue porque lo permitimos. Cada uno tendrá sus razones: unos porque viven del Estado y otros porque pensamos que alguien más debería sacarnos del problema que causamos cuando le dimos el segundo mandato. Porque sabíamos a qué punto llegarían las alucinaciones de este gobierno enajenado.
De algo puedo estar segura: después de este período de oscuridad la luz sólo puede llegar si cada uno de estos políticos panfletarios es ajusticiado con los procedimientos legales que marca la Constitución.
¿Por qué no reaccionamos ya mismo? ¿Será que los argentinos somos cobardes? De ninguna manera, simplemente esperamos sentados en el umbral de la vereda ver pasar el cadáver de nuestra enemiga.
Bárbara Benitez
HE DECIDIDO TAMBIÉN PUBLICAR ESTE ARTÍCULO. ES UNA CARTA ABIERTA QUE PUBIQUÉ EN MI MURO PERO QUE TRANSPARENTA MI SENTIR. ESTÁ HECHO DESDE LA PASIÓN Y LA IMPULSIVIDAD. SÓLO LE HICE UNAS PEQUEÑAS CORRECCIONES Y NO ME INTERESA SI LO SINTÁCTICO ESTÁ CORRECTO. ESTO ESCRITO FUE DICTADO POR MIS OVARIOS.
CARTA ABIERTA:
EN LA HISTORIA NEGRA DEL PAÍS
Doña, el 1 de mayo de 1974, Perón echó a los montoneros de la plaza, les dijo "esos imberbes" porque para él...ni yankies ni marxistas, sólo peronistas. Usted debería saberlo AUNQUE NUNCA FUE MONTONERA, bue, sólo repartió papelitos por 3 meses antes de ir a enriquecerse al sur a costa de pequeños propietarios. Pero no es de eso de lo que quiero hablar. YA TODOS SABEMOS DE SU MENTIRA.
Un año atrás le fueron a pedir dinero para hacer la estatua del General y usted dijo: "PARA ESE VIEJO DE MIERDA, NADA". Ésa "es la mierda" en la que usted se esconde para ganar votos que no lavarán su conciencia. Esa "mierda" de la que habló es la esencia de nuestro pueblo. Sabe muy bien que le faltó el respeto a quien todo le debemos. Porque nadie hizo más que él, desde el 43 hasta ahora.
Pero ya ve, sin la "mierda de su dinero", el General tiene su estatua, ya tenemos donde presentar respetos, aunque no hacía falta porque está encarnado en el corazón de cada obrero;sin embargo, eso es lo que él genera.
Usted pasará a la historia con más pena que gloria. Dentro de poquitos años no se la nombrará, como ya no se habla de Alfonsín, casi nada de Menem, muy poco de Néstor. Usted también pasará y si fuese recordada será EN LA HISTORIA NEGRA DEL PAÍS. Aunque si por algo espero que se la nombre es por su constante paseo por tribunales para hacer frente a tantas causas de corrupción.
La plata para la estatua la puso Macri (eso también será saneado en el recuerdo). Todos pasarán y ÉL, nuestro amado Pocho, nuestro siempre presente General, ... ¡persistirá, persistirá, persistirá! Aún hay quienes por él y Evita seguimos pensando en la lucha. La auténtica, la desinteresada, la del trabajador. Porque LOS DESCAMISADOS ESTAMOS PRESENTES, AQUÍ, AHORA. CON MÁS HUEVOS QUE RAZONES. PONIENDO GARRA ANTE LO INÚTIL DE SUS PALABRAS.
¡¡¡DIGNIDAD, PERONISTAS DE LA PRIMERA!!!
Barbara Benitez
